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El sector orgánico de México: Los desafíos de la revisión de insumos bajo la LPO

Por Matt Sircely
Traducido por Cesar Cartagena

Quince años después de la inauguración de la Ley de Productos Orgánicos (LPO) de México, el programa orgánico en México está entrando en una nueva fase de transición regulatoria. El 9 de junio de 2021, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) extendió formalmente el plazo hasta el 1 de enero de 2022 para que todas las importaciones de productos denominados como orgánicos demuestren el cumplimiento con los requisitos de la LPO.

El anuncio significa que, por ahora, el orden establecido de reconocer las certificaciones extranjeras como equivalentes a la de la LPO continuará hasta finales de este año. Si es que, y cuando expire el plazo, todos los productos deberán estar certificados bajo la LPO para que se les permita la venta orgánica en México. De manera similar, todos los insumos deberán ser insumos permitidos bajo el programa de la LPO.

Julia Elizabeth Pérez Lyons es representante legal en México de la Asociación para el Mejoramiento de Cultivos Orgánicos (OCIA, por sus siglas en inglés). También es ex miembro del Consejo Nacional de Producción Orgánica (CNPO), el cual asesora a SADER, Pérez explica, “Los fabricantes buscarán la aprobación bajo la LPO, ya que los productores extranjeros tendrán que cumplir con la normativa LPO si buscan exportar a México [después de enero 1], hasta no contar con acuerdos de equivalencia."

El anuncio de SADER citó la pandemia como la razón principal para retrasar la implementación y señaló específicamente la importancia de mantener el flujo comercial transfronterizo con países en proceso de búsqueda de equivalencia orgánica con México, un proceso que comenzó hace años. “Se esperan acuerdos de equivalencia con Estados Unidos y Canadá, y las importaciones tendrán un efecto positivo en el sector orgánico”, dice Homero Blas Bustamante. Ex presidente de IFOAM Latinoamérica, Blas es director de la certificadora Mayabio, presidente de la Sociedad Mexicana de Producción Orgánica (SOMEXPRO) y gerente general de Agro Orgánico. Blas predice una disminución en la cantidad de insumos aprobados de acuerdo con los criterios de la LPO "tan pronto como se alcancen los acuerdos con Canadá y el USDA".

Muchos operadores orgánicos en México ya están certificados según estándares internacionales específicos, con productos destinados a la exportación a la UE, Canadá, Japón o los EE. UU. Actualmente existen varias vías para que los fabricantes de productos orgánicos con certificación extranjera demuestren el cumplimiento bajo la LPO, incluyendo el proceso de "recertificación".

A medida que las autoridades que implementan los estándares de la LPO continúan detallando los procedimientos, las organizaciones de revisión de materiales (MRO, por sus siglas en inglés) están evaluando sus roles potenciales bajo el estándar. Actualmente, la potestad de realizar revisiones de materiales orgánicos recae en los organismos de certificación aprobados y en el organismo federal mexicano conocido como Grupo de Expertos. La LPO dirige a este grupo a tomar decisiones sobre el estatus de permitido o no de materiales de insumo y a mantener una lista de materiales, métodos e ingredientes permitidos.

Como explica Blas, “El Grupo de Expertos solo va a revisar sustancias y no suministros comerciales; esto es lo que el CNPO [Consejo Nacional de Producción Orgánica] ha acordado hasta ahora.” Los fabricantes que busquen la aprobación eventualmente se beneficiarán al ser "publicados de forma gratuita en la página oficial de la Secretaría de Agricultura", dice Blas, y agregó que la aprobación según la LPO "será un requisito para su uso en la producción orgánica". Al mismo tiempo, algunos tipos de insumos aún no están en la lista aprobada, “porque la Secretaría aún no ha establecido claramente el procedimiento [para la revisión de ciertos materiales] y el tema está en discusión en el Consejo Nacional de Producción Orgánica."

A medida que los certificadores aprueban productos para su uso bajo la LPO, normalmente recopilan listas internas de insumos aprobados. Aparte de la creciente Lista de Productos OMRI México©, aun no existe un recurso público que liste los productos aprobados, según Mabell Rivas, Gerente de Operaciones Técnicas de Certificación de Productos para Quality Assurance International (QAI), una empresa de NSF International. Rivas se unió al Panel de Revisión de OMRI México a principios de este año. Ella cree que es común que los certificadores en México confíen en las determinaciones de OMRI para los productos revisados según los estándares del NOP (Programa Orgánico Nacional), y adicionalmente verifican todos los criterios necesarios para garantizar que un producto a ser utilizado como insumo también se adhiera a la LPO.

Según la LPO, explica Rivas, “no se permite nada que se fabrique o produzca con nanotecnología. Este es un requisito específico de la LPO. El NOP también ha emitido una política al respecto, pero no está incluida en el reglamento. Para la LPO, es parte del proceso de revisión: necesitamos verificar que estos materiales no se hayan fabricado con nanotecnología."

Junto con las disposiciones sobre la nanotecnología, Rivas señala otra área de revisión: "Ciertos materiales, minerales extraídos, por ejemplo, tendrán criterios específicos relacionados con el impacto ambiental". Además de cumplir con los requisitos de aprobación orgánica, los fabricantes de plaguicidas deben registrar los productos con el organismo regulador federal, COFEPRIS (Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios). “A veces, esta aprobación de materiales bajo COFEPRIS puede llevar no meses, sino años”, dice Rivas. “Así que es difícil. Y a veces es realmente difícil para los fabricantes o para cualquiera demostrar que su material cumple con las normas."

Los estándares mexicanos reflejan de cerca los de la UE, dice Rivas, y la Lista Nacional de insumos de materiales permitidos es casi idéntica. Mientras que el NOP mantiene listas de materiales permitidos y prohibidos, la LPO cuenta con una sola lista de materiales permitidos. “La LPO requiere que la aprobación de materiales o insumos derivados o formulados con combinaciones de materiales de la Lista Nacional debe ser revisada y aprobada por el Grupo Mexicano de Expertos del Consejo Orgánico. Estos materiales deben agregarse a la ‘Lista de [materiales] formulados’ y esta lista debe publicarse en línea. Sin embargo, a la fecha, una lista de ingredientes específicos a usarse en formulaciones y en productos de marca aún no está bien establecida, lo que genera la necesidad de los servicios de OMRI en México”, dice Rivas. OMRI mantiene una comunicación constante con el Grupo de Expertos de SENASICA en asuntos técnicos relacionados con los insumos orgánicos.

Desde su punto de vista de certificación, Rivas explica cómo el Grupo de Expertos está diseñado a funcionar. “Es más como un comité, algo así como el Comité de Revisión Técnica de OMRI". (El Comité Técnico de OMRI es un comité de expertos que hace recomendaciones a la junta en torno a los estándares y criterios de revisión de OMRI). El proceso formal para agregar materiales genéricos o cambiar la Lista Nacional está definido por el trámite SENASICA-04-045.

Dado que los certificadores acreditados generalmente confían en las determinaciones de OMRI bajo el NOP, Rivas cree firmemente que OMRI juega un papel importante en la industria orgánica en México, al listar más productos aprobados para la LPO. “Tener una lista OMRI de sustancias aprobadas nos facilita la vida. Cada vez que tenemos que revisar y aprobar un material nosotros mismos, tenemos que seguir un proceso muy similar al que hace OMRI, además de verificar el cumplimiento de todo el sistema, lo que, a su vez, hace que el proceso de certificación sea más largo, más complejo y mucho más caro."

Basada en Oaxaca, Pérez cita los altos costos de revisión y “costos adicionales como el análisis de productos”, como obstáculos comunes que enfrentan los operadores en su trabajo con OCIA. Ella explica: “Muchas veces el costo de revisión es elevado para los fabricantes de productos cuando tienen pequeños volúmenes de producción. Si se ha solicitado una revisión a través de múltiples agencias, el costo se eleva aún más." A veces, dice Pérez, los operadores desconocen la necesidad de una revisión del material, o incluso la existencia de una lista de insumos permitidos. “Desde mi punto de vista muy personal, el mejor listado que podría existir para la LPO es a través de OMRI, ya que es reconocido mundialmente por ser experto, confiable y serio en la evaluación de materiales bajo varios programas de certificación.”

En respuesta a un comentario sobre el sello OMRI Listed® que aparece en vallas publicitarias en lugares como la zona rural de Michoacán, Rivas se ríe. "Eso significa que OMRI se ha vuelto popular en México, porque si sintieron que poner el logo allí es una buena estrategia de marketing, entonces eso significa que el nombre de OMRI es reconocido [por brindar] más seguridad y confianza."

Blas dice que los fabricantes de productos orgánicos en México siguen las mismas estrategias de marketing que utilizan las empresas convencionales: "promueven por internet, participan en exposiciones, visitan empresas que utilizan insumos y patrocinan eventos de productores agropecuarios." Él identifica una tendencia general donde la fuerza que impulsa la mayor innovación relacionada con el sector orgánico proviene de “la industria convencional y la producción [diseñada] para reducir el uso de agroquímicos.”

“Por ejemplo, he notado por la evolución de la Expo Irapuato en México que había empresas de agroquímicos y promoción de sus productos. Durante la última visita que hice en 2019, me sorprendió la ausencia de anuncios de productos químicos y [la presencia de] productos más ‘sostenibles’. La considerable tendencia a reducir residuos de los productos exportables considera ha influido en forma general”, dice, pero agrega que “no sea precisamente producción orgánica. Otra razón es la política del actual gobierno mexicano de reducir el uso de glifosato hasta su eventual eliminación en 2024, pero también existe una política de no usar agroquímicos.” Esa política es impulsada por varias secretarías que integran el Grupo Intersectorial de Salud, Alimentación, Medio Ambiente y Competitividad.

Listar productos con una organización como OMRI puede ayudar a los fabricantes de insumos a acercarse de mejor manera a los productores, dice Pérez. "No todas las agencias aceptan como válidas las revisiones realizadas por otras agencias de certificación, por lo que los fabricantes de insumos requieren el envío de información confidencial a múltiples agencias." Además, algunos certificadores no emiten “cartas de verificación de cumplimiento o reconocimientos a los fabricantes de insumos. Estar en una sola lista de insumos permitidos solo requiere tratar con una entidad de evaluación. Es una forma más sencilla en la cual productores pueden identificar materiales aprobados para su uso en la agricultura y procesamiento de productos orgánicos y los fabricantes pueden ampliar su cartera de clientes.” Rivas dice que ahora es un momento emocionante para la agricultura orgánica en México, la cual “produce una gran cantidad de alimentos que se consumen en todo el mundo. En términos de tierra orgánica disponible, México, en términos de superficie, definitivamente tiene mucho potencial. Se puede cosechar durante todo el año en la mayoría de las regiones, ¿verdad? Lo cual es una gran ventaja.”